El alcalde Kendrys Vasquez junto con el jefe de policía Vasque hacen un llamado a todas las reuniones ilegales para que se detengan de inmediato. En la tercera reunión ilegal encontrada por la policía de Lawrence durante el fin de semana, el alcalde Vasquez enfatiza el peligro inminente que estas reuniones representan para la comunidad de Lawrence. “Los casos de COVID-19 continúan aumentando en la ciudad de Lawrence, Hago un llamado a todos los que se reúnan y rompan las regulaciones de COVID-19 para que se detengan. Las reuniones ilegales afectarán inevitablemente las vidas de tantos trabajadores esenciales en la comunidad de Lawrence que no han tenido el privilegio de dejar de trabajar durante esta pandemia. Hago un llamado a todos los residentes de nuestra comunidad para que detengan estas reuniones, ahora ”. Las tres unidades se encontraron en 55-57 Springfield Street, 68 Common y 430 Essex Street. El director de ISD Michael Armano dice: “Las grandes reuniones no solo son peligrosas mientras luchamos para detener la propagación del virus COVID-19, sino que estas reuniones pueden ser mortales en espacios que no cuentan con sistemas de seguridad para proteger a las docenas de gente metida en un espacio pequeño. Con el apoyo de la administración, los esfuerzos del Departamento de Servicios de Inspección, el Departamento de Bomberos y el Departamento de Policía envían un mensaje claro de que la Ciudad no va a tolerar este tipo de comportamiento irresponsable. Estos asuntos serán investigados a fondo y las violaciones del código serán procesadas con la máxima extensión de la ley ”. 

Vasque y la policía de Lawrence trabajarán para cerrar diligentemente los clubes ilegales. En una cita que aborda la actividad ilegal, el jefe Vasque afirma: “Aparte del hecho de que esta actividad es ilegal en muchos sentidos, con narguile y alcohol, también es peligrosa e irresponsable. Estamos en medio de un aumento en los casos de COVID y Lawrence tiene una de las tasas de infección más altas del Commonwealth. Se ha demostrado que este tipo de comportamiento es un súper esparcidor y no solo afecta a los participantes, sino que pone a sus familias, amigos y otros en la comunidad en alto riesgo. No vamos a controlar esta pandemia hasta que la gente sea más responsable. Esperamos que esto sirva de advertencia no solo por las multas que se impondrán sino por la posible propagación del virus ”. Hasta el domingo 24 de enero, ha habido 211 muertes relacionadas con COVID y un total de 16,458 casos.